El próximo jueves, 22 de julio, comienzan las primeras sesiones un evento muy especial que va a tener lugar este final de julio en el Ecoparque de El Juncaral de Villanúa, las veladas nocturnas de arte y naturaleza “Guirandana y El Bosque”. Su director, Nacho Arantegui, de la Asociación Trarutan, nos explica de qué se trata este espectáculo tan original, que rememora la historia de Guirandana de Lay, curandera de Villanúa en el siglo XV, acusada de ser bruja y condenada a la hoguera por el juzgado de Jaca. El evento, organizado por la Comarca de La Jacetania, con la colaboración del Ayuntamiento de Villanúa y la Diputación Provincial de Huesca, se realizará los días 22, 23 y 24 de julio, en un primer turno, y continuará con un segundo ciclo los días 29, 30 y 31 de julio. En ambos casos, habrá dos pases diarios, a las 21.30 y 23.00 h, que serán, como señala su director, “una vivencia, para todo tipo de personas, en torno al paisaje y al arte contemporáneo”.
Guirandana y El Bosque es un evento nocturno, un espectáculo multidisciplinar en plena naturaleza. “Propiciamos con ello una conexión con la naturaleza que apela a sentimientos calmados, profundos, de conexión con todos los elementos que bañan el bosque”, comenta Arantegui. “Con las creaciones artísticas en simbiosis con el paisaje accedemos a mundos imaginarios, atmósferas que se abren a partir de tratamientos sutiles de la luz, intervenciones escultóricas y actuaciones de artistas de diferentes disciplinas. Todo ello desde una perspectiva site specific art, lo que fluye en los procesos creativos es el resultado, es fruto de un diálogo profundo y, entiendo, atento para con el paisaje”. Un paisaje que en este caso es el Bosque El Juncaral de Villanúa, poblado de frondosos pinos y abetos, junto al río Aragón y enmarcado por el siempre impresionante macizo de Collarada.
El proyecto de Guirandana y El Bosque surge de un encargo que realizó la Comarca de La Jacetania a Nacho Arantegui tras haber tratado con él en dos espectáculos anteriores. “La Comarca de la Jacetania me propuso diseñar una experiencia artística y medioambiental, concretamente en el municipio de Villanúa, por donde transita el Camino Tolosano. Teniendo en cuenta que el 2021 es un año especial, ya que se celebra el Año Jacobeo, comencé a indagar sobre las historias que jalonan el Camino y me llamó especialmente la atención el caso de Guirandana de Lay y el de otras mujeres del municipio que fueron criminalizadas y condenadas, de una u otra manera, siglos atrás por invocar a demonios y provocar todo tipo de males”, explica el director.
“Poco se sabe de estas mujeres, poca documentación ha transcendido, aparte de lo referente a los juicios que las condenaron. En todo caso me siento más identificado con la visión de unas mujeres especialistas en la comunicación con las potencias de la naturaleza, que podían curar enfermos a través de sus conocimientos ancestrales en botánica y utilización de hierbas, raíces, sustancias vegetales… Si ellas concentraban una sabiduría ancestral sobre rituales y uso de las plantas, entiendo que era por su capacidad de adentrarse en el mundo de la naturaleza. Tal vez se alejaban de las premisas de una sociedad medieval tremendamente misógina donde la doctrina y mandatos de la iglesia católica podrían ser asfixiantes”, señala Arantegui.
Y esa es la visión que se va a representar en Guirandana y El Bosque, una invocación a una visión mágica, la que pudo surgir de la relación entre estas mujeres con el mundo natural. “Siento que estoy más cerca en mi experiencia vital y artística de estas mujeres, de su visión y relación con la naturaleza. En mis procesos creativos me adentro en soledad en los paisajes, observo, diálogo con los elementos, siento que cada parte de ese hábitat tiene vida, tiene alma. Si la ocasión lo requiere, surge la obra, es un fluir muy hermoso que he aprendido a compartir. Las veladas artísticas son fruto de ello, puedo percibir como, de alguna manera, también pueden ser esa sustancia que se extrae del bosque para el beneficio de otras personas”, manifiesta.
Pero el espectáculo no es solo inspiración. Su base es la historia, la documentación. “Desde el punto de vista histórico me he adentrado en documentación que se refiere a los juicios a Guirandana de Lay, Narbona o Johanna “La Cura”, otros textos literarios, documentales… Es un punto de partida fundamental”, explica.
Aunque a la hora de diseñar la experiencia artística, “me he dejado llevar por esas impresiones a las que me refería anteriormente”. Por ello, Guirandana y El Bosque no es una recreación histórica. “Me remito a las emociones que he experimentado en estos paisajes, el diálogo con la naturaleza y desde allí, desde lo contemporáneo “cocinar las pócimas”, la creación artística contemporánea ofrecida al público que venga a vivir la experiencia”, señala el director.
El evento incluye diferentes manifestaciones artísticas, intervenciones escultóricas, obra del propio Nacho Arantegui, creaciones en video-proyección, video-mapping y espectáculo de luces led reactivas. Además los días 22, 23 y 24 de julio contarán con la actuación de Sweet Chilli Circus Company, una compañía de circo y danza contemporánea, y la música en vivo y performance de NeØnymus. Por su parte, los días 29, 30 y 31 de julio, habrá danza y marionetas de viento y luz a cargo de la Compañía Cal y Canto Teatro.
“Las veladas artísticas en entornos naturales que diseño y dirijo desde la Asociación Trarutan, las desarrollo con un exquisito equipo de profesionales, entre ellos Cristina Berlanga, cofundadora de Trarutan, hace ya 7 años, y Alberto Monreal, un joven artista con una extraordinaria proyección. Son proyectos que surgen de la comunión entre diferentes disciplinas artísticas y los ecosistemas naturales”, explica Arantegui. “Desde que nació Trarutan me rodeé de otros artistas, amigos y amigas, que se contagiaron del espíritu de las veladas y que me ayudaron a entender y valorar la importante aportación de las diferentes disciplinas artísticas. Todos ellos han sido fundamentales a la hora de consolidar este tipo de proyectos”.
Y el resultado de esta mezcla, de esta simbiosis, se aprecia en cada propuesta que diseña Arantegui: “Tienen una gran acogida, hay gente que ya nos sigue y se desplaza desde diferentes puntos del país, recogemos sus sensaciones por diferentes canales, el fundamental llega al terminar cada velada; el contacto con el público es cercano, directo, es muy emocionante”, reconoce.
Con estos ingredientes, teniendo en cuenta que Trarutan ya es conocida en La Jacetania por las experiencias realizadas anteriormente, además de la calidad y originalidad de la propuesta y “el fantástico ecosistema que nos ofrece el Ecoparque El Juncaral, con una vegetación frondosa marcada por elevados pinos y surcado por canales de agua, donde el público podrá experimentar un nuevo formato, adentrándose libremente por el espacio para explorar diferentes atmósferas e ir descubriendo las actuaciones e intervenciones artísticas”, explica, “todo ello anima a pensar que Guirandana y El Bosque tendrá una fabulosa acogida, a pesar de la situación irregular que vivimos por el tema pandemia y que hace que sea difícil realizar pronósticos”, admite.
Cabe recordar que en cada jornada habrá dos pases diarios, a las 21.30 y 23.00 h, y que el aforo está limitado a un total de 50 personas por pase. Las entradas están a la venta en la página web de Turismo Villanúa: http://www.turismovillanua.net/reservas-online-villanua